06 noviembre 2010
Adivina el personaje (I)
Porque con tu hálito añejo empañas la historia de España: "en España ha nacido una laicidad, un anticlericalismo, un secularismo fuerte y agresivo como se vio en la década de los años treinta. Y ese enfrentamiento, disputa entre fe y modernidad ocurre también hoy de manera muy vivaz". Porque te saltas muchos años de historia, de disputas entre moral católica y vidas humanas.
Porque nos odias profundamente, porque nos comemos poco a poco los pilares de tu casita de chocolate: "El aborto y los matrimonios entre personas del mismo sexo son opuestos al bien común [...] Las iniciativas que tienen como objetivo tutelar los valores esenciales de la vida, como su concepción y la familia, fundada en el matrimonio indisoluble entre un hombre y una mujer, ayudan a responder a algunos de los desafíos más insidiosos y peligrosos que hay que enfrentar hoy". Eres la Eris del siglo XXI.
Porque defiendes la vida que te sale del coño: "Puede haber una legítima diversidad de opinión entre católicos respecto de ir a la guerra y aplicar la pena de muerte, pero no, sin embargo, respecto del aborto y la eutanasia".
Porque pretendes que nos traguemos tanta tinta adulterada y vomitas cólera sobre los otros profetas: "Muéstrame aquello que Mahoma ha traído de nuevo, y encontrarás solamente cosas malvadas e inhumanas" (en un discurso citando la discusión entre el emperador bizantino Manuel II y un persa).
Porque tus palabras se mantienen en conflicto vivo con tus hechos, como siempre ha sido y ha de ser en la historia del patio de tu casa: "La cultura dominante presenta con insistencia un estilo de vida basado en la ley del más fuerte y beneficios fáciles y atractivos".
Porque blanqueas tu sepulcro: "el perjuicio que puede causar en la comunidad de los fieles de Cristo, sobre todo considerando su joven edad." (abogando la no destitución del sacerdote pederasta Kiesle).
Porque tus alabanzas suenan al unísono, sin grises, sin revisiones. Porque quien te desaprueba es silenciado por los medios de comunicación.
Porque con tus discursos, adoctrinamientos y campañas evangelizadoras en África y Asia, contribuyes a que cada año mueran de SIDA 3.100.000 personas en el mundo: "el sida no se puede resolver con eslóganes publicitarios ni con la distribución de preservativos, éstos, al contrario, sólo aumentan los problemas".
Por tus dos años arios (1941-1942) adoctrinando a jóvenes en las "Juventudes Hitlerianas".
Porque eres intransigente. Porque tu cabeza de águila imperial la guardas en una caja fuerte, blindada, ineluctable. Porque no tienes corazón.
Por todo ello, malnacido, hoy no te espero.
Se me viene en estos instantes a la cabeza una Carmen interpretada por la entonces exuberante y jovencísima Saritíssima canturreando por las calles de Ronda eso de: "Una, dos y tres, santíguate y muérete".
Lilly Allen's Fuck you!: http://www.youtube.com/watch?v=lXip4AGz_es
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Benedicto XVI eres la mejor CARICIA de DIOS.
ResponderEliminarTe quiero con toda mi alma.